Queriendo y sin querer he llegado a donde estamos. Con quien ha ocurrido acompañarme, en silencio y sin mirar a los lados, siempre al frente, siempre al frente. Oscuras sus palabras, peores sus hazañas. Criterios sin lograrlos. Cansados de la carrera que no tiene meta en el horizonte ¿para qué vamos a correr? Paseemos sin prisa, despacio y sonando nuestros pasos, volviendo a recoger los vestigios del pasado. Imágenes que en silencio te harán recordar, idiotas sin usar. Vulgares palabras que sólo te indican que gires y te des la vuelta, que juegues como ya no juegas.
Con la boca seca de pronunciar aquello que siempre te habías guardado para tu tú interior. Y que ahora me cuentas y yo callo, y escucho, y me guardo. Ahora montañas de silencio que cubrirán tus deseos de habitante de mí. Shh... sólo escucha ¿ves? No se oye nada.
Hoy suena: Los días raros - Vetusta Morla.
cla.
Bonitas palabras, Clara
ResponderEliminarRubén.